Del Parador
al lago helado de Marboré

El itinerario que describimos aquí va desde el final de la carretera que remonta el valle de Pineta, en el Parador de Turismo, hasta el lago de Marboré, en el famoso balcón de Pineta. Este es un duro itinerario de alta montaña y que asciende hasta los 2.605 metros, por lo que hay que estar preparado, llevar equipo y tener experiencia.
00:00: Dejamos el coche poco antes de llegar al Parador y la ermita de Nuestra Señora de Pineta (A), en un puente sobre el río subiendo a nuestra izquierda. Nada más cruzar el río, hay una basta zona de acampada donde podemos pernoctar.
00:10: Nos adentramos, por una pista forestal, en el bosque y un letrero nos indica que estamos dentro de los límites del Parque Nacional.
00:25: Pasamos por encima del riachuelo que baja directamente del balcón y que va en dirección al Parador.
00:30: Dejamos la pista forestal y nos desviamos a nuestra izquierda (B) directamente por el camino a buscar el balcón de Pineta. El camino se estrecha y pasa a ser un sendero de alta montaña, con numerosas rocas y barro. Las botas son imprescindibles. Muchas veces el camino se bifurca, pero no debemos preocuparnos, pues siempre acaba juntándose hacia el mismo destino. Ganamos mucho desnivel de una manera constante haciendo zig-zags.
03:00: La pendiente nos da un respiro y se tiende un poco. Nos hacemos una idea de la cara norte del Monte Perdido (F).
03:30: Llegamos al balcón de Pineta (D). La vista del glaciar de la cara norte es impresionante, así como la del valle de Pineta. Siguiendo el valle hacia arriba están los Astazous. La cámara fotográfica no debe descansar. El ambiente es totalmente alpino. Estamos en mitad de Los Pirineos.
04:00: Remontamos un poco más el valle, pegados a la ladera contraria al majestuoso Perdido, para llegar al lago helado de Marboré (E). El lago se haya su mayor parte del año helado. Podemos ver sus aguas de junio a principios de octubre. Es un gran lago de alta montaña, sin vegetación y rodeado de rocas. Es la guinda de este gran pastel que es el magnífico paisaje.

El itinerario no solo vale la pena en si por el lago en si, sino por todo lo que lo rodea.

	El cartel que nos índice la entrada al parque

De camino al balcón