Barranco Chimiachas  
BARRANCO CHIMIACHAS
El Barranco Chimiachas es un barranco que aúna espectacularidad, deportividad y buenas dosis de adrenalina. Partiendo de Alquezar, nos dirigimos hacia San Pelegrín. Pasado este cogimos el primer desvio a derecha, aparcando el coche junto a la balsas de Basacol.
Nosotros, no lo realizamos entero, sino que empezamos a la mitad de este, accediendo por Paso Len o Pasolén y Articazos, bordeando el Tozal de Tiestos. Son dos tramos de travesía asegurada con sirga y con buen patio que dan un plus en el acceso a este barranco. Entramos al barranco en su parte mas engorgada y espectacular. Un primer rapel, R8, desde una repisa en el margen orográfico izquierdo, sirve de ligero aperitivo de lo que vendrá después, con dos rapeles de gran entidad, R45 y R45, conectados sin respiro por otro R25. El último R45 atraviesa la bóveda de la Cocineta. Una enorme sala de tonos anaranjados, negros, rojizos y grises, tan asombrosa por su belleza como por sus dimensiones y que nos deposita en el Vero. Queda volver al coche. Para ello, seguimos Vero abajo intentando no meternos en el agua, por el margen derecho hasta la Gran Visera. Aquí, a la entrada de un caos de bloques sale una senda por esta misma orilla que salva el caos remontando una loma, para después volver a bajar casi hasta el cauce y desde allí subir a media ladera hasta el coche. Nosotros, no queriendo perder altura continuamos subiendo por una exigua senda que nos pareció buena para llegar al coche. Lo fue, pero no de forma directa sino que dando un pequeño rodeo que nos dejó en sendero que usamos de acceso.
HORARIOS:
ACCESO: 2h.30min. incluidas paradas
DESCENSO: 1h.30min
RETORNO: 1h.30min.