Tossa d´Alp  (2531 metros)
Ascensión fácil pero interesante a la Tossa d’Alp (2537 m) desde el Coll de Pal (2070 m), que discurre por la Sierra de Comabella y el refugio del Niu d’Àliga, punto culminante de la estación de esquí de Masella.

En 1981 subí al Puigllançada (2406 m) desde el Coll de Pal, y desde entonces siempre he considerado esta ascensión como la más monótona de todas las que he realizado. El Puigllançada no es más que un montículo herboso que sirve, en su cara norte, de techo a la estación de esquí de La Molina.

Cuando planeé la ascensión a la Tossa d’Alp, temí que me iba a encontrar más de lo mismo, pero me equivoqué. Subí a principios de noviembre, solo, con la idea de finalizar la temporada con esta excursión, ya que para el día siguiente se anunciaba la llegada del mal tiempo.

Dejé la ruta que lleva al Túnel del Cadí y entré en Bagà (786 m), siguiendo los indicadores que me habían de llevar al Coll de Pal. La carretera va hacia el norte, y a los 4 km hay el aparcamiento desde donde sale la pista de tierra (prohibido el paso excepto para los vecinos) que al cabo de 1 km llega al pueblecito de Grèixer, punto de partida para las ascensiones a las Penyes Altes del Moixeró.

Pasado este desvío, la carretera gira hacia el este y discurre paralela a la sierra del Moixeró, en medio de preciosos bosques. La calzada está en buen estado y la pendiente (media del 6,8 %) no es muy acusada, aunque habrá que verla en pleno invierno con nieve y hielo.

A 19 km de Bagà está el aparcamiento del Coll de Pal (2070 m), entre el Puigllançada (al este) y la sierra de Comabella (al oeste), donde dejo el coche. Un cartel indicador a la izquierda me señala la dirección de la Tossa d’Alp.

0.00 h. Empiezo a subir por una zona herbosa en dirección noroeste. De hecho estoy siguiendo el sendero GR-150-1, aunque al principio los hitos de piedras y las marcas de pintura roja y blanca apenas son visibles.

En realidad tengo que dirigirme a un collado situado al norte, entre las dos lomas más orientales de la sierra de Comabella. Cerca del collado reaparecen los hitos y las señales y ya no nos abandonarán hasta el final de la ascensión.

Si bien el inicio de la subida es tan aburrido como el del vecino Puigllançada, las zonas herbosas se transforman en el mencionado collado en una zona más rocosa y entretenida. Una vez alcanzado el lomo de la sierra de Comabella, se llega en poco tiempo a su punto culminante, el Cap del Serrat Gran, donde finaliza la primera subida.

0.45 h. Cap del Serrat Gran (2402 m). Desde aquí observo ya el refugio del Niu d’Àliga y la cima de la Tossa d’Alp. Me toca descender hasta la collada de Comabella (2347 m) y luego reanudar la subida por un sendero marcado hasta alcanzar el Puig de Comabella (2436 m), unos metros a la izquierda del sendero.
Un grupo de cinco águilas me dan la bienvenida, y decido que el nombre del refugio al que me dirijo es de lo más adecuado. Llego pues al refugio del Niu d’Àliga (2520 m), punto culminante de la estación de esquí de Masella.

Unos minutos más y alcanzo la cima de la Tossa d’Alp, señalada con un vértice geodésico y muy cerca de un grupo de antiestéticas antenas de telecomunicaciones.

1.30 h. Tossa d’Alp (2537 m). Al norte, la línea de los Pirineos aparece ya teñida de blanco. De hecho, durante la ascensión se han alternado las primeras (y escasas) nieves y los últimos (y también escasos) insectos (abejas, saltamontes,…).

Al oeste, la sierra del Moixeró continúa hasta más allá de las crestas de las Penyes Altes para enlazar con la sierra del Cadí. Al sur, y de este a oste, se divisan los Rasos de Peguera, la Serra d’Ensija y el majestuoso Pedraforca, que medio oculta la Serra del Verd.

Y al sur-sur, un mar de nubes y niebla oculta el valle del Llobregat, impidiendo el paso de los rayos del sol de otoño.

Aprovecho para descansar media hora mientras como algo y hago las pertinentes fotografías. Para el descenso, sigo el mismo camino, y en una hora alcanzo el Coll de Pal.

Comentarios: excursión muy fácil, con un desnivel de 467 m. El mapa del itinerario es del siglo pasado (Alpina, 1978): las alturas y la nomenclatura actualizadas son las descritas en el texto.